La Citrus Growers’ Association ha enviado una carta a todos los citricultores sudafricanos y sus exportadores en la víspera de la votación del SCOPAFF (Comité Permanente de Plantas, Animales, Alimentos y Piensos) de la UE sobre la redacción técnica de la propuesta del tratamiento de frío obligatorio para las importaciones de cítricos de terceros países.
La votación de ayer solo es un paso del proceso, pues la redacción técnica todavía tiene que llegar al Comité de Medidas Sanitarias y Fitosanitarias (MSF) de la Organización Mundial del Comercio para su consideración, donde, espera el sector sudafricano, el comité coincida con su visión de que la medida propuesta restringe el comercio y, por lo tanto, contraviene los principios de la OMC.
Los citricultores y exportadores sudafricanos esperan con impaciencia el resultado de la votación. «Es inevitable que se produzcan cambios en la comercialización de cítricos con la UE, ya sea hoy o en el futuro», reconoce un exportador, y añade que, si bien las naranjas están en el foco de esta propuesta, los limones no son hospedantes de la falsa polilla (FCM en inglés).
«Todavía no es un voto definitivo. Los terceros países tendrán después sesenta días para presentar sus consideraciones. Tras esta consulta, la UE puede decidir si enmendar el texto o dejarlo sin cambios. A continuación, la propuesta de ley final será sometida a votación de los 27 Estados miembros», explica Inge Ribbens en nombre de GroentenFruit Huis, la organización holandesa que trabaja para el sector hortofrutícola.
«Hemos hecho un trabajo exhaustivo sobre este dosier durante meses, también a la vista de la elevada presión que se ha ejercido últimamente sobre la Comisión, en particular por parte de los Estados miembros del sur, para introducir el tratamiento de frío. Se ha redactado una carta junto con las organizaciones sectoriales de Bélgica y Alemania que se ha enviado al Comité Técnico en Bruselas y, con el respaldo del retail de Países Bajos (CBL), también a varios departamentos de la Comisión Europea. Esperemos que varios Estados miembros expresen sus inquietudes. Creemos que la UE está trabajando con los países terceros en una etapa mucho más temprana, que debería haberse expresado y que solo lo ha hecho en el último momento, por lo que no ha habido ocasión de dar una respuesta sustancial», declara Ribbens.
«Además, carecemos de la base científica. El número de hallazgos de falsa polilla no muestra una tendencia al alza; de hecho, el número de hallazgos en naranjas está disminuyendo. Desde que la FCM fuera declarada plaga cuarentenaria en la UE hace tres años, se han producido 15, 12 y 8 interceptaciones en las naranjas sudafricanas en 2019, 2020 y 2021 respectivamente. Esto convierte esta medida en desproporcionada, sobre todo si nos fijamos en otros grupos de productos, donde un volumen comercial considerablemente menor implica mayores hallazgos», apunta Ribbens.
Extracto de la carta de la CGA a los representantes del MSF de la UE
La Sección Fitosanitaria de la SCOPAFF debe aprobar el 8 de febrero un proyecto de enmienda del Reglamento de Ejecución (UE) 2019/2072 referente a las exigencias de importación de Thaumatotibia leucotreta (falsa polilla o FCM) en los cítricos de países terceros, entre otros, Sudáfrica.
Este proyecto de enmienda de este reglamento incluye el requisito obligatorio de que todas las naranjas de países terceros de África y de Israel sean sometidos a un tratamiento de frío durante un mínimo de 16 días a una temperatura de entre 0 y -1 grados centígrados.
Este nuevo requisito tendrá un impacto negativo en el comercio de cítricos, de más de 100 años de antigüedad, entre Europa y Sudáfrica (el origen más importante de los cítricos de la UE durante el verano europeo, con un valor superior a mil millones de euros).
En particular, evitará la importación de naranjas ecológicas y no sometidas a tratamientos químicos, así como de varios cultivares importantes que no toleran esta temperatura. Esto provocará importantes huecos en la disponibilidad de naranjas de excelente calidad para los consumidores de la UE durante el verano europeo, que lleva décadas dependiendo de este suministro.
Este nuevo requisito propuesto no está justificado por motivos fitosanitarios:
El tratamiento de frío ya forma parte del Sistema Sudafricano de Gestión de Riesgo para la FCM. Pero los diferentes componentes del tratamiento de frío (tiempo-temperatura) se aplican sobre la base de una evaluación de riesgos objetiva en el enfoque de sistemas resultante de un control diligente y exhaustivo de manera semanal de la presencia de FCM en los campos de Sudáfrica antes de la cosecha de los cítricos.
La aplicación de un tratamiento de frío generalizado invalida los beneficios obtenidos antes de la cosecha con una intervención química mínima y la idea misma de un enfoque de sistemas.
El riesgo de FCM no ha crecido
El riesgo de introducción de FCM de Sudáfrica en la UE no se ha incrementado desde que la FCM fuera declarada plaga cuarentenaria en la UE hace tres años. El balance en los tres últimos años ha sido de 14, 19 y 15 interceptaciones (NONC). No se trata de una tendencia al alza.
Más interceptaciones de FCM en flores cortadas y otros productos hortícolas
Las naranjas no suponen un riesgo particularmente alto. Según los propios datos de la UE, las naranjas supusieron 15, 12 y 8 de las interceptaciones arriba mencionadas en los tres últimos años [2019 a 2021]; es decir, un claro descenso.
La enmienda propuesta es contraria a los principios de la OMC
Otros protocolos tiempo-temperatura disponibles, recogidos en el sistema de gestión de riesgos de la FCM de la UE y en el borrador de NIMF de la CIPF, han demostrado una eficacia similar a la del protocolo que la UE pretende imponer [la evidencia de esta eficacia fue publicada conjuntamente en la literatura científica CRI en 2016, sujeta a revisión por pares, y actualmente está reconocida como la posición de referencia mundial en el tratamiento de frío para FCM, y la base para el borrador de NIMF de la CIPF sobre FCM].
Como mínimo, deberían estar disponibles los protocolos de tratamiento de frío menos restrictivos, si el tratamiento de frío obligatorio es exigido, no el régimen actual mencionado.
Sudáfrica ha tenido un comercio citrícola exitoso con la UE durante más de 100 años. Los productores sudafricanos son sumamente conscientes de la importancia de proteger la producción ante plagas y reconocen plenamente el derecho de los productores europeos a que se les garantice dicha protección.
Los productores sudafricanos gastan cada año una cantidad estimada de 3.400 millones de rands al año para garantizar los más altos niveles de cumplimiento con las normas fitosanitarias de la UE en cuanto a FCM y CBS (mancha negra). Esta importante inversión es lo que permite la puesta en marcha de, probablemente, el sistema de gestión de riesgos más sofisticado en salud vegetal [en palabras de las autoridades de la UE]. Así, pues, no tiene sentido socavarlo todo con un tratamiento de frío obligatorio innecesario y desproporcionado que anula el sistema de gestión de riesgos de FCM progresivo, respetuoso con el medio ambiente y sostenible que Sudáfrica gestiona y mantiene.
«Les instamos respetuosamente a que se opongan a este proyecto de enmienda del Reglamento de Ejecución (UE) 2019/2072 y les invitamos a que le pidan a la Comisión Europea alternativas más proporcionadas, efectivas y, sobre todo, fácilmente disponibles, tras una nueva consulta con Sudáfrica», solicita Deon Joubert, enviado especial de la CGA: acceso al mercado y asuntos europeos.
Fuente: Freshplaza.